El no a la central nuclear en Río Negro no surge de una firma sino de miles/Por Evelyn Rousiot*

 
Viedma.- (APP)  En mayo de este año, con el gobernador en China acompañando al Presidente Mauricio Macri, empezaron a surgir rumores de lo que luego sería una amenaza real y concreta para el pueblo de Río Negro. Se había gestado un acuerdo entre los gobiernos provincial y nacional para que una central nuclear íntegramente de capitales Chinos y sin experiencia previa en el tipo de reactor a utilizar, sea implantada en la costa marítima de nuestra provincia.
A partir de allí, comenzó a sentirse en la piel, en las venas en la sangre de la población, una sensación que terminó materializándose en los hechos. De un lado viajes secretos, silencios, engaños, reuniones privadas entre funcionarios nacionales provinciales y municipales del otro autogestión en la información, unión, voces potentes y continuadas que gritaban NO a la Central Nuclear en la Patagonia. Y llegaron las asambleas y las jornadas de información y la marcha,  y los números de las convocatorias eran cada vez más contundentes, tan contundentes que provocaron el desborde discursivo del gobernador, llegando a la violencia verbal cuando los números que devolvían las encuestas no eran los deseados.
Si el gobernador, o alguno de sus funcionarios hubiese mostrado interés en los reclamos y hubiese asistido a alguna de las asambleas podría conocer que una de las premisas básicas era que la fuerza de las mismas proviene de la suma de miles de voluntades y jamás de un nombre y un apellido, que el reclamo popular prescindía de banderías políticas, gremiales, etc. Si hubiese oído realmente nunca se le hubiera ocurrido decir como lo hizo en su mensaje a los viedmenses del  1 de agosto, a días de las elecciones,  que él había decidido que la central nuclear no se construiría en Viedma y que el tema estaba cerrado porque él así lo decía.
 En estos días, luego que su fuerza política resultara tercera en las elecciones PASO, el gobernador vuelve a demostrar un grado de egocentrismo que debiera haber dejado de lado a la luz de lo que le gritó la población desde las urnas, gritos que provienen de múltiples causas. Pretende el gobernador instituirse en EL decisor del hecho que la planta nuclear China no se establezca en Río Negro.
Ni el Obispo Laxague, ni el Padre Luis, ni Andrés Di Leo, ni Fabiana Vega, ni Elvio Mendioroz, ni tantos y tantas ciudadanos y ciudadanas pensaron en erigirse los dueños de la voluntad popular, le pido entonces que al menos tenga respeto por ellos que tan arduo trabajo vienen realizando en estos meses de lucha. Se equivoca nuevamente sr. Gobernador, la Central Nuclear China no va a construirse en nuestras costas no porque Ud. estampe su firma en una carta, o sume a sus funcionarios en un proyecto de Ley, este proyecto no ha de concretarse porque los verdaderos dueños del poder, el pueblo de Río Negro, así lo han decidido.
*Presidenta del Bloque de Concejales del FpV Viedma