Viedma.- (APP) El subsecretario de Medio Ambiente, Guillermo Ceballos, destacó que “hemos podido acrecentar la estructura y por lo tanto los controles en los últimos años”, de manera que la actividad petrolera sea sostenible en forma segura, compatible con otras actividades como la frutícola. Indicó que también hay un seguimiento de los compromisos de remediación establecidos en la renegociación última de contratos petroleros y, en general, “hay un alto grado de cumplimiento”.
Ceballos indicó a la agencia APP que “sabemos que la actividad petrolera es de alto riesgo, toda acción humana tiene un impacto y en este caso es una industria con un impacto bastante importante, pero con el paso del tiempo las tecnologías han ido avanzando y hoy tenemos certeza que se puede desarrollar en forma segura y en forma compatible con otras”.
Dijo que también se ha ido actualizando el marco normativo y “se cuenta con procedimientos que permiten que la actividad se pueda hacer en forma segura, al margen que, como dije, sea de alto riesgo”.
Señaló que desde el organismo se ha puesto el foco fundamentalmente en Allen –área de mayor producción gasífera de la provincia-, “una vitrina de la explotación hidrocarburífera de la provincia”, ya que en función de ser a la vez una zona frutícola y poblada “demanda una mayor atención nuestra”.
Especificó que “desde el gobierno provincial hay una integración gran de los organismos de control, trabajamos codo a codo con la Secretaría de Hidrocarburos, el Departamento Provincial de Aguas (DPA) y la delegación nuestra del Alto Valle que está concentrada en la actividad del petróleo”.
Ratificó además a la agencia APP que en función de los compromisos de remediación establecidos en los contratos que se renegociación con empresas petroleras, también se hace un seguimiento y control en este sentido en forma periódica.
Dijo que en este marco se envían los informes a la Comisión de Seguimiento de los contratos petroleros, y desde la renegociación han constatado “un alto grado de cumplimiento” por parte de las operadoras.
Recordó que hay compromisos “a mediano plazo”, es decir, hay un cronograma con determinados plazos, de hasta cinco años para algunos procesos de remediación.
Respecto a estas fiscalizaciones, informó que se toman muestras en campo porque se cuenta con un Laboratorio de referencia en la provincia, el CIATI, que hace además contramuestras para verificar que la evolución de la remediación se hace de acuerdo a lo establecido, conforme a lo legal.
En cuanto a quejas o demandas de superficiarios, dijo que como organismo de control ambiental no han recibido formalmente muchas denuncias, sino que en “en general con mediáticas y no llegan a nosotros”.
Explicitó que en los últimos años habrán recibido una 10 denuncias en este sentido y se han dado las respuestas, se han hecho fiscalizaciones, ejemplificando que se ha denunciado que las napas estaban contaminadas o el agua de consumo, “y hemos ido con el DPA y se ha verificado que no es así a través de tomas de muestras”. (APP)