Nueva sede en Viedma de la Procuración Penitenciaria de la Nación

 

Viedma.-  (APP) El nuevo edificio está situado en Las Heras 675 de la capital rionegrina. Se amplió además su jurisdicción a Bahía Blanca, con lo cual se lo reforzará de personal y tendrá movilidad. Con autonomía, desde este organismo se trata de “defender los derechos de las personas privadas de su libertad bajo jurisdicción federal”.

En la inauguración, que se realizó días atrás,  estuvieron presentes el procurador Penitenciario,  Francisco Mugnolo y la delegada regional de la Procuración,  Gloria Inés Jara Guerrero. Participaron además autoridades nacionales, provinciales y locales, entre ellos, el vicegobernador Pedro Pesatti.

Mugnolo señaló que el organismo a su cargo “es nuevo en el Estado, tan nuevo es que a veces los jueces me dicen qué es eso, cuando los jueces deberían conocerlo; esto es producto que la Argentina es un país muy grande, con distintas realidades a lo largo y a lo ancho”.

Dijo en este sentido que “nosotros tenemos delegaciones para hacer saber que existimos y para hacer cumplir los derechos y deberes que hay en los lugares donde existen centros de detención”.

Destacó que “tenemos 10 delegaciones, en Jujuy, Chaco, Misiones, Entre Ríos, entre otros”.

Expresó que esto tiene que ver con revertir el centralismo, “no es que el Presidente me dijo que cree delegaciones, pero sí hubo una estrategia” en este sentido.

Señaló que “nos costó mucho llegar a esta instancia de tener una sede propia en Viedma” y que se decidió esto “porque para mí Viedma es la capital que no fue y desearía, no sé yo, pero que mis hijos vieran hecho realidad esto”.

“Si cada organismo tratara de distribuir sus sedes tal vez allí había un inicio de descentralización para que no todo este concentrado en Buenos Aires y además permitiría desarrollar el país”, consignó.

Afirmó que “es importante darle al Estado una visión de otra naturaleza de la que desgraciadamente, a lo largo del país, se ve muy poco; el Estado con dignidad, con eficacia, dotado de las cosas que necesita para cumplir su función”.

Indicó que “adherimos al gobierno abierto, a la gestión abierta, que cualquier ciudadano puede interpelarnos, que se sepa en qué se gasta la plata y fundamentalmente cómo los funcionaros cumplen con su deber”.

“Tenemos un rango muy alto de gestión, por exigencia y convicción, y eso permite administrar bien los recursos; hace 5 años que tenemos un presupuesto del gastamos el 98% del 100%, administramos con solvencia y decencia lo que nos asigna el Congreso”, aseveró.

Indicó que con la nueva sede en Viedma se amplía la jurisdicción a Bahía Blanca, porque allí hay una unidad penitenciaria muy importante, “y se van a nombrar personas calificadas para hacer este trabajo”, así como se va a destinar un medio de locomoción.

Reivindicó que en la Procuración hay personal “de todos los colores políticos”, señalando su rechazo a los fundamentalismos, “porque hay que hacer un trabajo entre todos”.

De Gloria Inés Jara Guerrero.

La delegada regional de la Procuración,  Gloria Inés Jara Guerrero, destacó que la creación de la nueva sede “muestra la intención gubernamental de ahondar en esta historia del tratamiento parcelario, defender los derechos de las personas privadas de su libertad bajo jurisdicción federal”.

Indicó que “el organismo cuenta con herramientas, goza de autonomía e independencia, está bajo la órbita del poder legislativo”.

Indicó que quien se encuentra en una cárcel federal “tiene la privación deambulatoria en función de una  condena o una causa en proceso, pero todos los demás derechos están plenamente vigente y nuestra labor se dirige a que se garantice el efectivo goce de esos derechos”.

Sobre la labor que llevan adelante, informó que “visitamos periódicamente los centros de detención, sin aviso previo, entrevistamos a las personas presas con confidencialidad, hacemos presentaciones judiciales cuando es oportuno, cuando se agravan las condiciones o hay eventuales apremios o impulsa habeas corpus individuales y colectivos”.

“Las cárceles deben ser sanas y limpias, para corrección, no para castigo, y que se cumplan las leyes internacionales y nacionales”, aseveró.

Reconoció que el marco no es bueno, “las cárceles rehabilitan o criminalizan, pero no podemos decir que se cumpla lo primero, entonces se hace necesario trabajar en la reinserción social y que baje la reincidencia, con lo cual las cárceles deben respetar los derechos humanos, derechos esenciales como la educación, mantener los vínculos familiares,  y tienen que dar las herramientas para esa reinserción”.

Dijo que la Procuraduría acciona junto a otros organismos, como la Defensoría General de la Nación, la Defensoría del Pueblo, universidades y hace actividades tendientes a cumplir con sus objetivos.