Viedma.- (APP) El Centro Universitario Regional Zona Atlántica (CURZA), de la Universidad Nacional del Comahue con asiento en Viedma, trae como disertante a cargo de un seminario de temática política y cultural a la doctora en Antropología Diana Lenton, valiente voz en defensa de todos pueblos originarios y en especial de la comunidad mapuche.
La presencia de la calificada especialista, docente de la Facultad de Filosofía y Letras (UBA) e integrante de la Red de Investigadores en Genocidio y Política Indígena, se producirá entre el jueves 11 y sábado 13 de mayo, en el marco de las jornadas iniciales del flamante doctorado de pos grado en Estudios Políticos y Culturales, recientemente creado por la UNComa .
Lenton tendrá a cargo un seminario de extensa denominación –Memoria y resistencia: imágenes y reconstrucciones del pasado en torno a la política indígena argentina- que seguramente aportará contenidos válidos e irrefutables acerca de los atropellos históricos y actuales contra los pueblos originarios, con especial abordaje de la cuestión territorial.
En archivos periodísticos disponibles por internet se encuentran claras y contundentes definiciones de Diana Lenton, algunas de las que se reproducen aquí parcialmente .
En una entrevista para Página 12 el periodista Darío Aranda le preguntó: –¿Por qué afirma que el Estado argentino se funda sobre un genocidio? Y su respuesta fue la siguiente. “–El Estado moderno constituye una forma de entender las relaciones entre Estado y sociedad, y construye todo un modo político de accionar, una normativa, instituciones que se fundan en el mismo momento que se realiza el genocidio. Y no lo relacionamos sólo porque es contemporáneo al genocidio sino porque esa estructura de Estado requirió que no hubiera más diversidad interna en el Estado. Se anulan los tratados con los indígenas, el Estado se garantizó que no iban a interferir en la constitución de ese Estado. Es lo que se llama genocidio constituyente, son genocidios que dan origen a un Estado.”
––Existen sectores que aún niegan que haya sido un genocidio. ¿Qué pruebas dan cuenta de que sí lo fue?–, insistió el cronista.
“–Las ciencias sociales no tienen un concepto analítico acabado. Desde el campo jurídico internacional sí, lo provee Naciones Unidades en 1948 para juzgar los crímenes del nazismo. Esa definición habla de distintos elementos. Es genocidio cuando se puede establecer la intencionalidad de destruir a un pueblo. Otra característica es impedir la reproducción de ese grupo y también el robo de niños, cuando son secuestrados y entregados a familias de grupos dominantes, y se les reemplaza los nombres, porque así se atenta contra la continuidad de ese pueblo porque se le roba la memoria” contestó Lenton.
Como hechos concretos en torno a la calificación de genocidio se expresó de la siguiente forma: “–Matanza de población civil. Algunos tienen la imagen de batallas al estilo romántico de un ejército contra otro. La característica de la campaña de Roca es que está principalmente dirigida a la población civil. Las memorias del comandante Prado dicen claramente que el ataque a las tolderías es para caerles encima a las mujeres y niños que quedaron cuando los hombres no estaban. Estaba planificado así para llevarse el botín, sobre todo el ganado, y las familias porque ésa era la operación que iba a llevar a los indios a rendirse. Son operaciones contra la población civil, donde mueren mujeres y niños, o eran enviados como mano de obra esclava para el trabajo doméstico urbano o para la agroindustria, caña de azúcar y viñedos. También se cumplen otros elementos de genocidio, el someter a la población a condiciones que acarreen daño en su subsistencia, que pueda provocar enfermedad o muerte, y eso implicaron los traslados de la población sometida a campos de concentración.”
Y añadió, específicamente que –“Hubo campos de concentración en Valcheta, Martín García, Chichinales, Rincón del Medio, Malargüe, entre otros. Son todos lugares donde se encierran a las personas prisioneras sin destino fijo. La autoridad militar era la dueña de la vida y muerte de ellos. La idea era de depósito porque iban a ser distribuidos. Eran prisioneros y esclavos. Se recibían pedidos de Tucumán, ingenios, de Misiones, estancias. Llegaban como familias y se los separaba. Hay pruebas de la violencia, cartas entre curas y arzobispos. Había muerte por las condiciones a las que estaban sometidos, ahí está también el genocidio. Y también había suicidios por el trauma social al que estaban sometidos. Los padres sabían que les quitaban a sus hijos, lo veían y decidían matarse. O mujeres que se tiraban al agua con sus hijos. En Valcheta hay documentos donde se describe que no se les daba alimentos y morían de hambre.” (Página 12, 10/10/2011)
Por otra parteen el portal de la Agencia Terra Viva, en una nota firmada por Mariángeles Guerrero, Diana Lenton afirmó que: “Hay una voluntad de presentar, mediáticamente, a la Patagonia como una sociedad dividida, como una especie de apartheid donde los blancos están aterrorizados por los indios”, y añadió que “esa estrategia se construyó a lo largo de la historia creando un enemigo en la frontera sur, pero que actualmente funciona como un recurso electoral o que esconde políticas públicas a favor de los grupos económicos poderosos”.
“—Hay cosas que vienen desde hace mucho tiempo y algunas nuevas. Entre las cosas que vienen desde hace mucho tiempo está el énfasis en la extranjería mapuche, en separarlos del resto de los pueblos originarios. Hay gente que expresa que no tiene problemas con los pueblos originarios, pero que los mapuche son más peligrosos, más malos. Hay toda una construcción de los mapuche como diferentes. Esa construcción está asociada a la peligrosidad, a lo que antes llamaban «indios belicosos», como una característica intrínseca que no tiene que ver con una respuesta a situaciones concretas o a una defensa o una posición política sino casi como algo atávico, algo propio de las características casi biológicas del grupo. Lo que encuentro de nuevo —nuevo pero también recurrente— es que esta campaña mediática asocia a los mapuches con propósitos de ruptura del orden legal o a lo que se llama terrorismo. Se hace una lectura del fenómeno mapuche partiendo de la base de que los hechos violentos que se han sucedido fueron hechos por mapuches, base que mucha gente no pone en duda, y paradójicamente entendiendo que eso estaría siendo en acuerdo con el sector político que gobierna actualmente” –– opinó , en otro tramo del artículo de Terra Viva. (Publicado el 24/11/2021)
El mencionado seminario, que dictará la antropóloga Diana Lenton en el CURZA, está dirigido a graduados de carreras políticas y sociales, con el cobro de arancel. Comienza este jueves 11 de mayo a las 9; los interesados deben inscribirse en la sede Viedma de la Universidad Nacional del Comahue. (APP)