Viedma.- (APP) El ministro de Gobierno y Comunidad de Río Negro, Rodrigo Buteler, recorrió y analizó el estado del Catamarán Currú Leuvú II junto al presidente de la Asociación Amigos del Catamarán, Marcelo Szczygol, y el intendente de Viedma, Pedro Pesatti, con quienes comprometió un aporte de $2.000.000, por decisión de la Gobernadora Arabela Carreras, para acompañar la refacción de la embarcación.
«El Currú Leuvú II tiene un valor turístico y patrimonial muy importante para Viedma. Por eso y por decisión de la Gobernadora, acompañaremos su refacción y puesta en valor. Nuestro deseo y el de todas y todos los viedmenses es verlo nuevamente navegando por el río Negro», explicó Buteler.
La emblemática embarcación está bajo tutela del Municipio de Viedma y la Asociación Civil «Amigos del Catamarán» será la receptora del aporte que se utilizará para comenzar con los arreglos. En total, la vuelta del catamarán a las aguas del río Negro demandará una inversión de 6.000.000 de pesos.
Los pontones (plataformas laterales flotantes) del Currú Leuvú II no tienen los ánodos de sacrificio, piezas vitales para evitar o hacer más lento el proceso de corrosión del casco por su permanente contacto con el agua.
Por ello, el catamarán quedará en manos del Taller Naval Malvinas Argentinas, de San Antonio Oeste, el cual dispondrá de entre 6 y 10 empleados para realizar los trabajos necesarios. La primera etapa constará de las refacciones en los pontones para que vuelva a flotar sin inconvenientes.
En diciembre de 2021, una marea extraordinaria causada por una sudestada superó la línea donde uno de los pontones se encuentra perforado y eso produjo el anegamiento de un sector de la cubierta, lo que derivó en el hundimiento de esa parte de la embarcación que se encuentra amarrada a metros de la sede de la Subprefectura de Carmen de Patagones.
Marcelo Szczygol
El legislador Marcelo Szczygol (JSRN) señaló a APP sobre la creación de la Asociación Amigos del Catamarán que “tiene como objetivo ayudar al catamarán, que es un emblema del río, es la única embarcación de pasajeros que tenemos y queremos que vuelva a ser una realidad”.
Szczygol indicó que “soy optimista respecto a los recursos que tiene la comunidad, como el río y el mar, y tampoco hay que olvidarse de todo el trabajo hecho”, mencionando que cuando el catamarán quedó varios años sin funcionar “se reparó por iniciativa de Miguel Roa y Naldo Campisi y en ese momento no tenía ni siquiera un muelle para amarrar; hoy lo tiene en pleno centro de Viedma”.
Indicó que lo que hoy paraliza la navegación es el estado de los dos pontones “pero se pueden arreglar, si bien es costoso, y por eso el fin de la asociación es colaborar en este sentido”.
Consideró que si bien hay más bancos en el río que obtaculizan la navegación, cuando “el río está alto por influjo de la pleamar se pueden hacer distintos paseos y eso se puede ir diagramando y rotando todas las semanas”. “Hay momentos para ir río arriba y río abajo, las rutas están súpermarcadas, conozco bastante el río y tengo contacto con quienes lo navegan y con Prefectura que acuerdan con mantener el catamarán”, señaló.
Entre otros proyectos, informó que “queremos que el catamarán haga paseos gratuitos para las escuelas”.
Coincidió también que más allá del catamarán, para fines turísticos puede haber otras alternativas paralelas de embarcaciones menores con o sin motor, que permitan “darle vida al río Negro”. (APP)