Viedma.- (APP) Documento elaborado colectivamente en Río Negro por la UnTER junto a organismos de derechos humanos, sindicatos, comunidades y organizaciones sociales, ambientales, del arte y la ciencia:
“Como cada 24 de marzo, Día de la memoria por la verdad y la Justicia, marchamos con la memoria por delante como semilla para construir futuro. Este día, a 48 años del golpe cívico, eclesiástico, militar y empresarial, nos volvemos a encontrar en las calles, para recuperar y mantener viva la lucha de lxs compañerxs detenidxs-desaparecidxs por el Terrorismo de Estado, con la plena conciencia que nos atraviesa un presente complejo en que debemos recuperar y fortalecer con unidad y organización las enseñanzas que nos dejó la historia.
La dictadura genocida que se inició en 1976, se autodenominó Proceso de Reorganización Nacional, con el objetivo de imponer el modelo de país colonial de fines del Siglo XIX. Para ello, avanzó ferozmente con la represión y el genocidio sobre las organizaciones del pueblo.
También, como denunció Rodolfo Walsh, impuso la miseria planificada, profundizó la concentración económica, abrió paso a la explotación por parte de los capitales financieros, endeudó y empobreció a los sectores populares.
La llegada al poder de Javier Milei y Victoria Villarruel y sus políticas neoliberales, nos muestran que los cómplices de la dictadura nunca se fueron. No es casual que la primera frase del presidente electo en el balotaje fue “Volvemos a 1878”. La silenciaron, pero el objetivo estaba planteado en su plataforma electoral y lo llevaron a la práctica. Una vez más nos gobierna la crueldad. Lo doloroso es que un sector de la sociedad votó este regreso y aún lo defiende.
Argentina está empobrecida y endeudada con organismos internacionales como el FMI. El gobierno refrenda la impunidad de los responsables de la deuda ilegítima tomada a cien años, Mauricio Macri, Federico Sturzenegger y Luis Caputo. Este último, premiado con el Ministerio de Economía. Mientras reivindican la salida del ajuste y las privatizaciones, estatizan deuda privada de sus amigos y socios. La casta tiene pleno empleo en el gabinete y en los medios hegemónicos mientras el presidente tuitea 24/7 y se aumenta el sueldo al 48%.
En contraste, a las organizaciones sociales que son ejemplo de lucha, solidaridad y empatía, que bancan las ollas y los merenderos, que buscan la salida organizando a los excluidos de esta economía, que enfrentan la crisis en los rincones donde más golpea, las ponen en la mira de la política represiva y de ajuste. Los descamisados de la patria y las niñeces que pasan hambre, son una de las principales variables de ajuste de un gobiernoque demuestra su faceta más cruel. Y mientras se enriquecen funcionarios y jueces con salarios y jubilaciones de privilegio, vemos el agudo deterioro del salario de los trabajadores.
Mientras los responsables de la crisis económica y humanitaria que vivimos se pasean por la televisión como sabios de la política y la economía, el pueblo padece el hambre y muere por falta de medicamentos. Los privilegiados imponen la crueldad como política de Estado y se felicitan por imponer la Miseria planificada 2.0 para mantener sus privilegios.
Como militantes del campo popular no desconocemos que la crisis de hoy es el resultado de una sumatoria de situaciones, incluso de definiciones políticas tardías o inexistentes. Lo que tenemos muy en claro, es que hasta la llegada de Milei, en 40 años de recuperación de la democracia, nadie se atrevió a tanto coartando el derecho a la protesta y la organización.
Este ajuste comenzó con represión a través del Protocolo antipiquetes de Patricia Bullrich, con el objetivo de poner en la mira a las organizaciones sociales. Sabemos que las organizaciones son ejemplo de lucha, solidaridad y empatía. Enfrentan la crisis en los rincones donde más golpea, bancan las ollas y merenderos, buscan la salida organizando a quienes excluye este plan económico. Es la clase trabajadora, desde las infancias hasta lxs jubiladxs pasan hambre, son las principales variables de ajuste de un gobierno profascista.
Rechazamos el DNU, la Ley ómnibus y toda definición del gobierno que avasalle derechos.
Repudiamos el intento de desconocer al poder legislativo. Exigimos a todxs lxs representantes de Río Negro que frenen esta entrega, de no hacerlo serán cómplices.
Vinieron a destruir las bases democráticas que construimos durante años de lucha, por la ampliación de derechos laborales, de mujeres y disidencias, de lxs jóvenes, de Pueblos Originarios. Vinieron a rematar la naturaleza, los bienes comunes y los territorios, las empresas estatales, las economías regionales, para entregarla al empresariado cipayo e internacional. Vinieron por todo, y para lograrlo también pretenden destruir la cultura en todas sus expresiones, porque así destruyen la identidad del pueblo. Vinieron por la educación, la ciencia y la salud pública. Quieren doblegar la voluntad de resistencia popular, mercantilizando la vida.
A esta política de exclusión decimos No, una y mil veces No. Por eso estamos acá, en las calles sosteniendo las banderas de las Madres y Abuelas, honramos su inclaudicable lucha por la liberación social y nacional, en pos de una sociedad más justa y soberana, por un verdadero cambio social contra los oprimidos de ayer y hoy. Es urgente la unidad en la acción de todos los sectores del campo popular, de las centrales obreras para construir colectivamente la lucha, para confluir en un paro general contra el ajuste y el saqueo.
Frente a la exclusión y el negacionismo reivindicamos la lucha de lxs 400 compañerxs de la comunidad LGTBQ detenidxs y desaparecidxs durante la dictadura genocida y por todxs lxs perseguidxs y asesinadxs en democracia. Víctimas de los discursos de odio, por una parte de la sociedad atravesada por la cultura patriarcal y segregacionista. Son los mismos que aplauden la misoginia de Milei y sus funcionarios. Son los mismos que avalan la discriminación hacia los pueblos originarios, contra sus referentes y también contra militantes populares. Basta de represión por luchar. Organizarse no es delito. Cese de todos los procesamientos. Libertad a todxs lxs presxs políticxs!
Repudiamos el patoterismo gubernamental contra las provincias y sus representantes elegidxs democráticamente. Pretenden asfixiar las economías regionales y extorsionar a gobernadorxs. Advertimos que algunxs por los medios exponen encendidos discursos contra el poder central, pero en sus territorios avanzan con el ajuste. Tenemos impresa en la memoria la feroz represión en Jujuy del año pasado y el peligroso discurso del gobernador de Santa Fe de militarizar la provincia e imponer el estado de sitio en Rosario, para luchar contra el narcotráfico. No hay lugar para la doble vara. O se está con el pueblo o se está en contra.
El Gobernador Alberto Weretilneck tiene la oportunidad de llevar a la práctica lo que declaraen la teoría. Debe dar respuesta a los justos reclamos de lxs trabajadorxs estatales, de los Pueblos Originarios y de los sectores populares. Así como seguimos exigiendo que el Estado Nacional reconozca el genocidio en la mal llamada Campaña al desierto, hoy exigimos a la provincia que deje de avasallar derechos del Pueblo Nación Mapuche.
Exigimos la derogación de la Ley de tierras y de Minería que expulsa a las comunidades de sus territorios ancestrales, habilita el extractivismo y legitima la expropiación de la naturaleza por empresarios extranjeros como Joe Lewis. Además de destruir las economías regionales.
El Estado rionegrino se encuentra en crisis, la provincia está endeudada y el ajuste tiene diferentes facetas. La ministra de Salud aceptó que la situación sanitaria hoy es peor que en pandemia, escuelas sin condiciones edilicias, comedores, ni transporte garantizado. Al brutal recorte nacional en los comedores comunitarios se suma la quita de subsidios para transporte. El mismo gobernador asegura que no se puede esperar nada de Nación. Por ello, es urgente poner en debate el presupuesto con la participación de todos los sectores y redistribuir la riqueza entre lxs trabajadorxs, porque somos nosotrxs lxs que sostenemos la economía provincial. Basta de pagar a la banca internacional a costa de la destrucción de los sectores populares.
Retomamos las palabras de Germán Abdala “No nos despanzurremos los que estamos del mismo lado, mientras ellos nos masacran sin complejos”. Hoy más que nunca debemos estar unidos todos los sectores del campo popular. Tenemos la firme convicción que todo conflicto entre nosotrxs puede resolverse con las herramientas que construimos democráticamente. Instamos a trabajar de manera colectiva para fortalecernos en cada espacio.
Con el orgullo de nuestra historia de lucha, con la memoria por delante, hoy más que nunca reivindicamos la vida de lxs 30.400 compañerxs, el coraje de Madres y Abuelas, la obstinada coherencia de lxs sobrevivientes. Hoy recordamos a Jorge Julio López y su compromiso con la verdad, seguimos reclamando aparición con vida. Hoy estamos en la calle, impulsadxs por la potencia de lxs jóvenes, de las mujeres y disidencias que ya son tsunami, con la fortaleza inclaudicable de los Pueblos Originarios para demostrar que no pudieron nunca doblegarnos, ni con el remington, ni con las torturas, ni el hambre, mucho menos la motosierra. Estamos de pie, para resistir, para construir, para recuperar la política a favor del pueblo en pos de una sociedad más justa, solidaria sin exclusión. ¡No nos han vencido! ¡No nos vencerán! Hoy más que nunca ¡Nunca Más!
Seguiremos luchando por:
No al pago de la deuda ilegítima, fraudulenta y usuraria con el FMI, no al endeudamiento permanente con los organismos internacionales.
Contra el DNU, la Ley ómnibus y toda medida que avasalle derechos. En defensa del derecho a la protesta, No al Protocolo represor de Patricia Bullrich.
La única necesidad y urgencia es la defensa de la soberanía y seguridad alimentaria de nuestro pueblo.
Tierra, Techo y Trabajo para todxs. Trabajo con todos los derechos.
Defensa del territorio, naturaleza, de los bienes comunes, del territorio y la naturaleza de la preexistencia de los pueblos originarios. Aplicación plena del Convenio 169 OIT. No a la militarización de los territorios. Sí a la Soberanía territorial.
No a la privatización de empresas públicas. Garantizar el desarrollo productivo sostenible y el pleno empleo.
Defensa de la Educación Pública, la Universidad Pública, Salud Pública, la Ciencia, Conicet y los Centros Científico Tecnológicos (CCT), información pública TELAM.
Apoyo a los organismos públicos que protegen y fomentan las artes y expresiones culturales. No al vaciamiento y despidos en el INCAA (Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales), INT (Instituto Nacional del Teatro), INAMU (Instituto Nacional de la Música), FNA (Fondo Nacional de las Artes), CONABIP (Comisión Nacional de Bibliotecas Populares), Museos Nacionales, ENERC (Escuela Nacional de Experimentación
Cinematográfica), CCK (Centro Cultural Kirchner), Tecnópolis. Por la defensa del patrimonio y soberanía cultural.
Cese de la persecución política y desprocesamientos a dirigentes, luchadorxs,
organizaciones políticas, sociales, culturales, sindicales, pueblos originarios y sectores en lucha, organizarse no es delito. Libertad a todxs lxs presxs políticxs. Que se caigan todas las causas judiciales-políticas por organizarse.
Juicio y castigo de los responsables políticos, eclesiásticos, empresariales, civiles de la dictadura cívico y militar. Recuperación de la identidad de hijxs y nietxs. Continuidad de los juicios de lesa humanidad.
En defensa de la vida de lxs jóvenes. Menos represión. Al narcotráfico se lo combate con Más escuelas, centros culturales y deportivos, políticas sociocomunitarias de contención y acompañamiento. Por el derecho a vivir en paz en todo el territorio”.