Viedma.- (APP) El funcionario nacional aclaró que no está de acuerdo con la decisión del ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, de conformar un «comando» para llevar adelante el desalojo ordenado por la justicia.
El secretario de Derechos Humanos, Horacio Pietragalla, señaló en declaraciones a las prensa en su visita a La Pampa que «era una locura» el traslado de mujeres con niños y una embarazada al penal de Ezeiza y consideró «un error» que se llevara hasta esa prisión a otras tres mujeres mapuches después del desalojo en Villa Mascardi.
El funcionario nacional cargó la responsabilidad en la decisión de una jueza y defendió el operativo de las fuerzas de seguridad porque no hubo armas letales ni persecución a las personas.
De todos modos, el funcionario nacional aclaró que tampoco comparte la decisión del ministro de Seguridad, Aníbal Fernández, de conformar un «comando» para llevar adelante el desalojo ordenado por la justicia.
Consultado sobre la represión a una comunidad mapuche en Villa Mascardi, respondió: «Venimos trabajando con la comunidad hace un año y medio, son tres causas judiciales distintas, con lo que tuvo que ver la comunidad en esas tierras, algunas son propiedad de privadas, otras del estado. A partir de la intervención de la secretaria hay un pedido al poder judicial para ser facilitadores de las negociaciones. Eso se hizo durante un año y medio, reuniones de trabajo con la comunidad y el poder judicial que tenía la causa. El estado nacional arbitró todo para poder reglamentar esa permanencia de ellos en ese lugar. Hasta que ellos se bajaron de la negociación».
Pietragalla consideró que «hay que destacar, porque hicimos un esfuerzo muy grande para que puedan tener legalmente esas tierras. Fue un trabajo difícil, el estado empezó a negociar para que sean tierras relevadas por el INAI y a partir de ahí registrar a la comunidad y que puedan acceder legalmente, como otras».
En ese sentido, precisó que «ellos plantean cuestiones ancestrales. Hay una machi, es la única que tiene el país. Ella declaró que ese lugar es sagrado, hay que contemplarlo de una manera diferente. Hicimos todo el esfuerzo, pero la misma comunidad decidió dejar la negociación al no querer registrarse en el INAI como comunidad».
En ese punto, «todo quedó en manos del poder judicial. No podíamos avanzar mucho más. En los últimos acontecimientos hubo incidentes en territorios aledaños, eso hizo que la justicia avance en el pedido de desalojo. El estado cumplió órdenes de la justicia».
Fuente: Diario de La Pampa